Descubriendo Roma en 2 días
Hola viajeros, en este post vamos a hablar de una de las ciudades con más historia del mundo, Roma. La capital italiana es visitada por millones de turistas al año y sabemos por qué, su mezcla de arquitectura, historia y gastronomía la hacen la ciudad ideal para perderte en ella. En esta ocasión tuvimos dos días para disfrutar de esta maravillosa ciudad ¿nos acompañas en nuestro recorrido?
Día 1
Llegamos al aeropuerto de Fiumicino a las 11:00h de la mañana y cogimos el tren que lleva directo al centro. La estación de trenes se encuentra dentro del propio aeropuerto y desde allí sale el tren Leonardo Express, una línea directa que te deja en Termini en solo 30 minutos y cuesta 14€ (si quieres saber más sobre cómo llegar al centro de Roma haz clic aquí). Cuando llegamos a Termini fuimos caminando hasta nuestro hotel, el Domus Sessoriana, el cual es un convento reconvertido en hotel, al lado de la Basílica Santa Croce in Gerusalemme. No se encuentra en el centro de Roma pero está muy bien conectado con una parada del tranvía justo enfrente y con el Coliseo a 10 minutos (55€/per para 2 noches con desayuno incluido).
CONSEJO: Los hoteles en Italia son bastante antiguos y no se suelen corresponder las fotos con la realidad. Así que te recomendamos que leas los comentarios de otros viajeros en Tripadvisor y veas las fotos que ellos suben, te ayudará a no llevarte un susto cuando llegues.
Después de dejar las maletas en el hotel nos dirigimos a lo que es el monumento más conocido de Roma, el Coliseo. Nosotras compramos la entrada por internet para ahorrarnos la cola. El precio de la entrada fue 16€ más 7€ por reservar día y hora pero incluía la entrada al Foro Romano y al Palatino (Puedes comprar tu entrada online aquí). Es una actividad totalmente recomendable y que hay que hacer una vez en la vida, el interior del Coliseo es apasionante.


Al salir del Coliseo nos dirigimos al Monte Palatino y Foro Romano que es un museo al aire libre de las Ruinas Romanas. Si no quieres entrar, a lo largo de todo el paseo que lo bordea lo puedes ir viendo y leyendo pequeñas descripciones que irás encontrando. Lo que no te puedes perder es subir a uno de los laterales del Monte Palatino y observar las vistas del Foro con el Coliseo de fondo(una vista impresionante). Justo al lado del Coliseo se encuentra con el Arco Constantino del año 315, una parada obligatoria para terminar de conocer bien la zona.
Ya era la hora de comer y estábamos muertas de hambre pero como queríamos almorzar en un sitio que nos habían recomendado, optamos por probar un mítico de la gastronomía italiana, el helado. Simplemente delicioso.
Continuamos nuestro día visitando el monumento a Vittorio Emanuele II, el primer rey de la italia unificada y en el se puede ver la tumba del soldado desconocido desde 1921, un lugar donde brilla siempre una llama custodiada por dos soldados. La entrada al interior es libre (y tienes baños gratuitos!!) y subiendo a la planta superior se pueden apreciar las vistas de la ciudad.

Después de deleitarnos con unas vistas espectaculares nos dirigimos a la Piazza Venezia y caminamos por la Via del Corso, una de las calles principales y comerciales de Roma. En una de las trasversales se encuentra la que para nosotras es la fuente más impresionante que hemos visto, la Fontana de Trevi. Es imposible que no esté llena de turistas buscando un hueco para sacarse una foto y tirar una moneda (y es algo que debes hacer).
Desde ahí seguimos subiendo por las pequeñas calles hasta llegar a la conocida Plaza de España con su fuente del tritón y la escalinata. Además, si te apetece podrás ver justo enfrente las calles con las tiendas más caras de la ciudad. Y después de tanto caminar por fin llegamos al lugar que nos habían recomendado en la Via della Croce, un restaurante de toda la vida llamado Pastificio Guerra que tiene un plato de pasta diario (bastante contundente) por 4€, eso sí, tenías que comer en la calle porque el local es bastante pequeño, pero vale la pena. Y para rematar la comida y no comer más en todo el día, nos acercamos a Pompi Tiramisú que se encuentra en la misma calle y en la que probarás el mejor tiramisú tradicional de tu vida, además de otras muchas opciones. Si quieres saber más sitios donde comer en Roma entra aquí.

Después de comer nos dirigimos al parque más importante de Roma: Villa Borghese. Desde ahí también se pueden apreciar unas vistas impresionantes de la ciudad con el Vaticano de fondo. Para recorrernos el parque elegimos alquilar una bicicleta ya que es bastante grande y tiene muchas cosas que ver como el Reloj de Agua de Pincio, un estanque con el Templo de Esculapio, El Silvano Toti Globe Teatre o La Galería Borghese, uno de los museos más importantes de la ciudad.


Después de recorrernos y descubrir el magnífico parque de Villa Borghese, nos dirigimos a la Piazza del Popolo con sus dos iglesias idénticas a cada lado y su gran vida, ya que suele estar llena de gente. Es una plaza bastante importante ya que constituía la entrada a la ciudad en tiempos del Imperio Romano. La mayoría de la gente visita la Iglesia de Santa María del Popolo porque contiene dos obras de Caravaggio entre otras obras renacentistas.
NOTA: Cerca de esta plaza se encuentra la Via Margutta, famosa por aparecer en la película “Vacaciones en Roma” de Audrey Hepburn. También puedes acercarte a la Via Veneto donde se grabo la película «La Dolce Vita».
Sé que dijimos que no comeríamos más pero no nos pudimos resistir a probar un helado en una de las mejores gelaterías de las ciudad, la Gelatería dei Gracchi, cerca de la Piazza del Popolo.
Y con esto acabamos nuestro primer día en Roma.
Día 2
Empezamos el segundo día (después de desayunar en el hotel) dirigiéndonos al Circo Máximo que era el circo mayor de Roma con capacidad para 300000 espectadores, actualmente quedan muy pocas ruinas de este sitio pero vale la pena visitarlo por su historia. Desde aquí nos fuimos caminando a uno de los lugares más cinematográficos de Roma, la Boca de la Verdad en la que cuenta la leyenda que si un mentiroso mete la mano en la boca se queda sin ella, así que cuidado en meter la mano si has mentido.
Continuamos subiendo por la Via Luigi Petroselli viendo el Pórtico al Foro Olitorio, el Teatro Marcelo, el Templo di Apollo Sosiano hasta llegar al Campidoglio (plaza donde se encuentran varios museos importante de la ciudad) pasando por la Piazzale Caffarelli con su famosa terraza desde donde podrás ver unas magníficas vistas de la ciudad.
Desde aquí nos dirigimos a un lugar bastante curioso llamado el Santuario de los Gatos, son unas ruinas cercanas al lugar donde asesinaron a Julio César donde actualmente se encuentra una colonia de gatos. Puedes sentarte y apreciar un lugar histórico mientras acaricias un gatito de la colonia. No te preocupes que todos esos gatos se encuentran vacunados y cuidados por el Ayuntamiento de Roma.
Cruzando sus pequeñas calles llegamos a unos de los puntos más emblemáticos de Roma, El Pantheon, un antiguo templo romano convertido en iglesia que es la obra arquitectónica mejor conservada de la Antigua Roma. La entrada es gratuita y vale la pena, aunque haya mucha gente, por ver su impresionante cúpula con un agujero en el centro para dejar entrar los rayos del sol. En los alrededores se encuentran numerosas cafeterías pero no debes perderte la experiencia de tomarte un café en la Casa del Caffè Tazza d´Oro.
Después del café fuimos a la Piazza Navona, una de las plazas más bonitas y populares de Roma conocida por sus tres fuentes siendo la central una obra de Bernini. Todos sus laterales están llenos de restaurante en los que no te recomendamos que comas si quieres conservar tu presupuesto. En esta plaza aprovechamos para rellenar nuestras botellas de agua en una fuente que se encuentra en el lateral de la misma.


NOTA: en toda la ciudad hay pequeñas fuentes de agua potable.
Como ya era la hora de almorzar nos dirigimos a probar otro mítico de la gastronomía italiana, la pizza. Elegimos comer en la Pizzería Da Baffetto que se encuentra justo debajo de la Piazza Navona y es conocida por aparecer en el libro de Federico Moccia “A tres metros sobre el cielo”. A parte de ser famosa los precios son asequibles y las pizzas están buenísimas. Existe la pizzería original y la Baffetto II que tiene un aspecto más renovado.
Para disfrutar de una de las mejores vistas del río Tíber, nos dirijimos al Ponte Umberto I con el Castel Sant Angelo al lado y el Vaticano de fondo. Y nos dirigimos al Vaticano para el que teníamos entrada. Al igual que con el Coliseo llevamos la entrada comprada con anterioridad para librarnos de algunas colas. El precio de la entrada es de 30€ incluyendo la visita a la Capilla Sixtina.

Continuamos nuestro día subiendo hacia la Terraza Panorámica Passeggiata del Gianicolo, un mirador desde la cual se pueden ver unas vistas increíbles, para luego continuar por la orilla del Río Tiber hasta la zona de Santa María del Trastevere, lugar ideal para probar comida italiana y famoso por el ocio nocturno. Nosotras elegimos probar el Trapizzino, una especie de bocadillo muy bueno en el bar llamado Trapizzino cerca del Ponte Sisto. Nos perdimos por las calles de esta zona hasta llegar a Supplì Roma, famoso por hacer unos de los mejores supplìs de la ciudad, es una especie de croqueta rellena de arroz, carne y mozarella. Delicioso.

Después de comer cruzamos el Puente Cestio hasta la Isla Tiberina (isla del río Tiber) un lugar con mucho encanto y que te ofrece unas vistas increíbles de Trastevere. Y con esto y un par de kilos más acabamos nuestros dos días en Roma, aunque si quieres conocer todo lo que puedes ver y hacer en en la capital italiana no te pierdas nuestra entrada «60 cosas que ver y hacer en Roma«
Y, como siempre les decimos, vivan su vida viajando, viajen para vivir.
Nos encantó Roma. Nosotros fuimos 4 días y nos dio para ver mucho.
Además pillamos la Roma Pass con la que no ahorramos bastante dinero, muchas cosas y entrar gratis en algún sitio. Así que fue un viaje de 10.
Roma es de esos lugares en la que una nunca se cansa de volver, muy bueno el post.